Los buñuelos de viento son un clásico en la repostería de muchas culturas y se pueden encontrar en diversas variantes en todo el mundo. Son perfectos para disfrutar en cualquier momento del día, ya sea como postre, merienda o acompañamiento de un café.
BUÑUELOS DE VIENTO
Su versatilidad y sabor irresistiblemente dulce los convierten en una opción popular en celebraciones y eventos especiales. Sorprende a tus seres queridos con estos tiernos y deliciosos bocados que seguramente desaparecerán en un abrir y cerrar de ojos.
Los buñuelos de viento son pequeños y esponjosos bocados de delicia que se deshacen en la boca. Estos dulces tradicionales se preparan con una masa ligera y aireada, que se fríe hasta obtener un dorado crujiente por fuera y una textura suave por dentro. Una vez cocidos, se espolvorean con azúcar glas para un toque extra de dulzura.
Ingredientes:
- ¼ kg de harina
- 2 o 3 huevos
- Sal
- Aceite
- Azúcar
- Agua ½ litro
Preparación:
1. Se mezcla ½ litro de agua, un poco de aceite y una pizca de sal y se pone a hervir. Cuando hierve, se añade ¼ kg de harina y se mezcla. Cuando la masa está bien integrada, se aparta del fuego y se deja reposar.
2. Se baten 2 o 3 huevos y se añaden a la masa, removiendo y mezclando bien.
3. En una sartén, se pone a calentar una buena cantidad de aceite y cuando empiece a hervir, se añaden con una cuchara pequeñas porciones de masa y así se van friendo los buñuelos. Se espolvorean con azúcar y ya están listos para servir.